Vehículos conectados: la tecnología que promete reducir la cuota del seguro automotriz
- La información se obtiene mediante la conexión del vehículo a una caja negra, un dongle o una aplicación de teléfono móvil que permite saber cómo, cuándo y dónde conduce el usuario, posibilitando una reducción de hasta 60% en la prima.
- En Chile, se espera que esta modalidad sea una realidad en poco tiempo, reconfigurando el negocio de las aseguradoras, debido a que 82% de los chilenos manifiesta que se cambiaría de compañía si una empresa -que no es la suya- invierte en esta tecnología y le da la posibilidad de tener un pago acorde a su “calificación” como conductor.
Santiago, Chile. 28 julio, 2017.
Si tu compañía de seguro automotriz te ofrece conectar tu auto a un sensor para saber cómo conduces y, en base a esta información, obtener hasta un 60% de descuento en la prima, ¿aceptarías? Para conocer más sobre la percepción de los chilenos respecto de esta nueva tendencia, que basa el cobro del seguro automotriz en el comportamiento del usuario, controlando la velocidad y monitoreando cuántos kilómetros recorre cada conductor, qué trayectos y en qué franjas horarias, la empresa especializada en el desarrollo de soluciones de IoT (Internet de las Cosas), Telemática, Telemetría y Telecontrol de activos, Redd, realizó un sondeo a 222 personas.
De acuerdo al estudio, 87% de los encuestados está de acuerdo con que se implemente este sistema en el país, siendo los más entusiastas los conductores entre 36 y 45 años, con 35%; seguidos por aquellos de 26 a 35 y de 45 a 55 años, ambos rangos etarios con 22%; luego por personas entre 18 y 25 años, con 12%; y por último por quienes tienen más de 55 años, con 10%. Sin embargo, al preguntar si estaría dispuesto a instalar en su auto un dispositivo para medir su comportamiento como conductor, la cifra baja a 79%; 49% de hombres y 51% de mujeres. Los más predispuestos a hacer uso de esta tecnología son los conductores entre 36 y 45 años (34%), en segundo lugar los de 45 a 55 años (22%), en tercera posición los 26 a 35 años (21%); y los menos proclives son los de 18 a 25 años, con 13%; y los mayores de 55, con 10%.
Al respecto, Rodrigo Martínez, señala que “los chilenos son muy celosos con su información personal y especialmente cautelosos cuando se trata de entregar ciertos datos, por eso hay diferencias entre los que están de acuerdo con que se implemente este sistema y aquellos que estarían dispuestos a instalar un GPS en su auto para dejar al descubierto su comportamiento al volante”. Respecto a las edades, el ejecutivo explica que esta tendencia es más fuerte en aquellas personas entre 36 y 45 años, debido a que -probablemente- son los conductores que pueden invertir en la contratación de un seguro para su vehículo y, por lo mismo, a quienes más les interesa la posibilidad de obtener descuentos. “La inclinación a instalar un sensor es más baja en los conductores entre 18 y 25 años, porque posiblemente no tienen seguro o son sus padres los que costean este gasto; y en los mayores de 55, debido a la menor predisposición tecnológica que existe en este rango etario”.
El seguro automotriz basado en el uso comenzó en el año 2000 impulsado por el aumento en el número de autos conectados y teléfonos inteligentes; y actualmente se ha convertido en la principal oferta en la mayoría de las compañías de seguros, especialmente en América del Norte y Europa. “Se espera que en Chile esta modalidad sea una realidad en poco tiempo más, incluso ya hay algunas compañías que la han sondeado, así que cuando irrumpa en el mercado local sin duda reconfigurará el negocio de las aseguradoras, las cuales deberán estar preparadas para enfrentar una rotación de clientes, quienes optarán por la empresa que ofrezca los mejores descuentos por un comportamiento responsable al volante”, asegura Rodrigo. Esto porque 82% de los entrevistados señala que se cambiaría de compañía si una aseguradora -que no es la suya- invierte en esta tecnología y le da la posibilidad de tener un pago acorde a su “calificación” como conductor. Los más fieles son los usuarios entre 46 y 55 años, ya que 30% dice que no se iría de su actual firma aunque la competencia ponga a su disposición este sistema de cobro; siguen los conductores de 26 a 35 años y de más de 55, con 23%; mientras que en los usuario de 36 a 45 años alcanza el 20% y entre los de 18 a 25 apenas llega al 5%, lo que según el experto de Redd no sorprende puesto que “los jóvenes tienden a ser menos leales con las marcas y se cambian de proveedor sin mayores complicaciones si hay una oferta mejor en el mercado”.
Por último, un 72% de los chilenos señala que modificaría su comportamiento al volante con el objetivo de conseguir una prima más baja, con mayor predisposición en los hombres (51%); mientras que 77% cree que se reducirían los accidentes de tránsito si las compañías aseguradoras implementan este tipo de tecnología. “Como la información está disponible en línea o en aplicaciones que permiten a los clientes supervisar sus patrones de conducción y hacer los ajustes necesarios para apegarse cada vez más a las normas del tránsito, evidentemente podría haber una baja en los sucesos que ocurren por negligencia del conductor o por conducir en vías con mayor índice de siniestralidad”, finaliza.